Te animas a tejer un sombrero? no es tan difícil como parece. Ha que seguir el patrón circular y la clave está en el almidonado.
Para darle esta forma tendrás que preparar una solución de agua y almidón (fécula de maíz) y sumergir el tejido ya terminado. Preparar un recipiente de vidrio, plástico o telgopor que te sirva como "modelador". Puede ser un bol plástico de cocina, y lo colocas boca abajo sobre una chapa o un mantel plástico. Sobre este, acomodas el sombrero que está mojado con la solución para almidonar, y lo ajustas para que tome bien la forma. Dejar secar.
Para que quede más resistente, puedes usar cola de pegar.
Una vez seco, realizar la terminación con cintas y flores.
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